sin cafeina

Me tuve que separar de ti, que le vamos a a hacer, por lo menos por un tiempo, por lo menos unos meses en lo que vuelvo a necesitarte para leer, para escribir, para pensar, para ponerme nostálgica y darle la vuelta a la taza mientras observo el portal y el parque y la gente; mientras veo como alguien olvida un libro y ese olvido me signifca mi porpia suerte que ha sido dejada a la deriva en un parque, en algun sitio donde pocos pasan, en la silla triste y mohosa de los tiempos que se acumulan como el òxido en el hierro mojado. Han pasado dos meses sin que beba una gota de café; la falta de él no se si me deprime o me tranquiliza; La usencia del café me tiñe de blanco la sangre por la leche...Ahora tengo anemia, anemia de café. Es difícil vivir sin mi aromática taza de buen café, sin que me acompañe a reflexionar, a vivir...